Desde que le conozco a DIOS y empecé a relacionarme con El, lo que más quería era trabajar en su obra, con El, y para El. Y como me gusta enseñar (es el don que tengo) lo primero que pensé es enseñar y compartir todas las maravillas que estaba aprendiendo. Pero, además, me comprometí en otros ministerios para servirle a mi DIOS todo el tiempo disponible. Me cansaba, no tenía paz y no crecía espiritualmente. Le reclamé a DIOS: “Solo quiero servirte”. ELOHIM me dio el versículo que está en Isaías 43:10: “10Vosotros sois mis testigos, dice Jehová, y mi siervo que yo escogí, para que me conozcáis y creáis, y entendáis que yo mismo soy; antes de mí no fue formado dios, ni lo será después de mí.” Ser siervos de JEHOVA es conocerle, creerle y entenderle. Lo más importante es la relación íntima que El quiere tener con nosotros. Abrirle nuestro corazón y saber de Sus pensamientos, escuchar de Sus consejos y de Sus maravillas. La Biblia nos habla de un plan general para nuestras vidas pero el plan personal, lo que El preparó para cada uno, nos dará DIOS mismo cuando estemos en intimidad con El. Luego estaremos preparados para servir en el lugar y ministerios que El tenga para nosotros.
Excelente reflexión !! Creo que en intimidad con él siempre tendremos revelación de lo que quiere para nuestras vidas. Lo más importante es que él no nos abandona, realmente somos nosotros los que nos alejamos y no reconocemos la voz de JEHOVA que nos quiere contar su propósito. Gracias por la reflexión! DTB
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